El pasado del ferrocarril chileno fue muy importante para la historia social, económica y política del país. Dentro de la red ferroviaria, encontramos la red principal que nacía en Valparaíso y llegaba a Puerto Montt. De esta red central salían varios ramales que unían localidades que no alcanzaba a cubrir la red principal. Una de esta fue la red que comunicaba la red central con las principales ciudades de la costa de la actual región del Bío Bío, Talcahuano y Concepción. La ciudad de Concepción ha sido por años la segunda ciudad mas grande de Chile detrás de Santiago, al mismo tiempo se crea el puerto de Talcahuano. El ramal que sale de la red ferroviaria central hacia Concepción, nace de la estación San Rosendo, pequeña localidad que se ubica en las confluencias de los ríos Laja y Bío Bío.
Con el auge ferroviario San Rosendo comienza a surgir como una urbe importante. En esta localidad comienza a instalarse diferentes tipos de comercio y servicios varios, destacándose los hoteles, restoran y empresas de transportes. La localidad comienza a modernizarse y avances en obras públicas como pavimentos de sus calles, creación de plazas públicas, infraestructuras varias hacen de San Rosendo un pueblo diferente al lado de las otras localidades vecinas que se sumían en el trabajo agrícola menor que caracterizaba al Chile rural anterior a la reforma agraria.
Con la llegada de la dictadura militar, las políticas ferroviarias cambian radicalmente. Se comienza a eliminar los servicios ferroviarios a nivel nacional. Se elimina el ferrocarril al norte de Chile y paulatinamente se cierran ramales menores. Al mismo tiempo el número de itinerarios baja ostensiblemente y con ello va muriendo lentamente la vida del tren en Chile. Sin embargo San Rosendo no sufre rápidamente la decadencia, esta llega fuertemente a finales de la década de los ochentas. El punto mas importante para San Rosendo fue el cierre de la maestranza local. Llegaron a trabajar mas de mil trabajadores en San Rosendo, en el año 2008 solo se cuenta siete.
Para la llegada de la democracia la realidad de los ferrocarriles en Chile es penosa. La empresa se encontraba totalmente quebrada, a esto se sumaba la mala calidad de los trenes y el mal servicio interno de los viajes. Sin embargo los gobiernos de la concertación adoptan la política de revivir de cierta forma los trenes en Chile. Se crean los servicios de cortas distancias, siendo los ejemplos mas palpables los servicios de Metrotrén de Santiago a Rancagua, San Fernando y TilTil, además de la modernización de Merval en la quinta región. Unas de estas medidas fue la creación del servicio Metrotrén en la octava región que luego se denominaría BioTren. Sus servicios reviven las estaciones de la rivera norte del Bío Bío. San Rosendo no fue la excepción.
Actualmente la localidad de San Rosendo no es la misma de antaño, la baja de la vida ferroviaria, más el reemplazo de la mano de obra agrícola y de servicios varios a la forestal, hacen de San Rosendo una pequeña localidad de no más de cinco mil habitantes y que se ve opacada por su vecina ciudad de Laja que alguna vez fue mas pequeño que San Rosendo, pero que ahora su población supera en cinco veces a San Rosendo.